Un proyecto europeo devuelve a Alto Campoo el carácter de estación de montaña

Publicado por: Redacción EFE Verde

Alto Campoo ha recuperado su carácter de estación de montaña gracias al proyecto europeo Life Econnect, que ha permitido la restauración ambiental de los terrenos afectados por la estación de esquí, la conectividad ecológica de espacios Natura 2000 de la Sierra Híjar y la Sierra del Cordel.

La vicepresidenta de Cantabria, Eva Díaz Tezanos, ha visitado Alto Campoo para conocer el resultado de este proyecto del Programa Life de la UE.

Tras cuatro años de trabajo del Ejecutivo, a través del departamento que dirige Díaz Tezanos y de CANTUR, junto a SEO/BirdLife, Alto Campoo se ha convertido en la primera estación de esquí con su propio Plan de Gestión de la Biodiversidad. La vicepresidenta ha destacado el éxito absoluto de esta iniciativa y se ha mostrado satisfecha de poder devolver a la montaña su aspecto natural, con praderías donde hasta ahora había pedregales, y conectando, además, dos áreas naturales que habían quedado separadas por la estación de esquí.

El director del CANTUR, Javier Carrión, ha calificado de “importantísimo este proyecto, que ya es una realidad”, ya que ha permitido “devolver al medio lo que era del medio”. “Nosotros teníamos cierta ‘culpa’ en la degradación de esta área y por eso somos los primeros implicados en este proyecto”, ha asegurado.

LEER MÁS AQUÍ

La guerra contra la agricultura familiar: “sutil, cruel y perversa”

Publicado por: Sputnik

La producción comunitaria de alimentos está amenazada por las grandes industrias agropecuarias. “Hay una guerra”, dijo a Sputnik Mauricio Vives, presidente de Graneco, una cooperativa uruguaya agroecológica que la FAO considera es una buena muestra de producción responsable. Según Vives, agricultura, comer sano y cuidar la tierra van de la mano.

El 70% de los alimentos del mundo son producidos por la agricultura campesina y sólo el resto es generado por empresas que, mayoritariamente, no se dedican a terminar con el hambre, sino a forrajes o a producir recursos para biocombustibles. Teniendo las cifras en cuenta, se podría pensar que la “guerra” mencionada por Vives la están ganando los agricultores comunitarios. Sin embargo, el panorama es bastante distinto.

El tipo de producción agroecológica de alimentos familiar generalmente no utiliza siembra directa, y en lugar de combatir la vegetación silvestre, “mal llamada maleza”, con químicos, antes de sembrar hace un laboreo del suelo.

LEER MÁS AQUÍ

Sembrando bosques donde hubo minería en Madre de Dios

Publicado por: El Comercio

Un proyecto de CINCIA propicia, a pesar de las grandes dificultades, el sembrado de árboles en zonas de Madre de Dios impactadas por la minería.

Mientras recorremos, comidos por numerosos mosquitos, la concesión minera ‘Paolita II’, manejada desde hace una década por el señor Pedro Ynfantes, de origen arequipeño, el ingeniero forestal France Cabanillas nos muestra con orgullo un terreno donde distintas especies arbóreas pugnan por crecer. Luchan por ganar un espacio, por darle nuevamente vida a una tierra antes cubierta por la floresta  y hoy convertida en un campo pelado por la minería en Madre de Dios.

—¿Y cuándo va a haber un bosque de nuevo?
—En años, quizás en unos 50 años ya pueda haber algo. Pero de todas maneras hay que hacerlo.

De momento, se aprecian unos empeñosos troncos, acompañados de unos cartelitos que avisan de qué planta se trata. Cerca de una carambola (Averrhoa carambola) hay un shihuahuaco (Dypterix micrantha), más atrás una mora (Morus nigra), delante de ellos un azúcar huayo (Hymenaea oblongifolia), a unos metros un camu-camu (Myrciaria dubia) y hacia la derecha un brote de la legendaria lupuna (Ceiba petandra).

LEER MÁS AQUÍ

Sembrando bosques donde hubo minería en Madre de Dios

Publicado: 29 de septiembre 2018

Publicado por: El Comercio

Un proyecto de CINCIA propicia, a pesar de las grandes dificultades, el sembrado de árboles en zonas de Madre de Dios impactadas por la minería.

Mientras recorremos, comidos por numerosos mosquitos, la concesión minera ‘Paolita II’, manejada desde hace una década por el señor Pedro Ynfantes, de origen arequipeño, el ingeniero forestal France Cabanillas nos muestra con orgullo un terreno donde distintas especies arbóreas pugnan por crecer. Luchan por ganar un espacio, por darle nuevamente vida a una tierra antes cubierta por la floresta  y hoy convertida en un campo pelado por la minería en Madre de Dios.

—¿Y cuándo va a haber un bosque de nuevo?
—En años, quizás en unos 50 años ya pueda haber algo. Pero de todas maneras hay que hacerlo.

De momento, se aprecian unos empeñosos troncos, acompañados de unos cartelitos que avisan de qué planta se trata. Cerca de una carambola (Averrhoa carambola) hay un shihuahuaco (Dypterix micrantha), más atrás una mora (Morus nigra), delante de ellos un azúcar huayo (Hymenaea oblongifolia), a unos metros un camu-camu (Myrciaria dubia) y hacia la derecha un brote de la legendaria lupuna (Ceiba petandra).

LEER MÁS AQUÍ

Descubre por qué los alimentos tienen cada vez menos nutrientes y vitaminas

Publicado: 05 de septiembre 2018

Publicado por: Hola México

La composición del suelo, los fertilizantes utilizados o la rotación de las cosechas son algunos de los factores que afectan a la calidad y sabor de los productos.

Tomates más rojos, manzanas brillantes, huevos idénticos… A pesar de que las estanterías están repletas de productos atractivos, la realidad es que tanta belleza no se refleja en el sabor ni en el valor nutricional de los alimentos. Especialmente en los países desarrollados, las dietas con productos naturales y frescos están siendo sustituidas por una alimentación rápida, artificial y, por consiguiente, vacía de nutrientes. Esas naranjas redondas y perfectas poseen menos cantidad de vitamina C que las de hace 50 años y esas coloridas cebollas no aportan la misma cantidad de selenio. Hay diferentes factores que pueden afectar al contenido en nutrientes de una verdura y que provocan que los alimentos que se consumen actualmente poco o nada tengan que ver con los que se ingerían hace medio siglo. Desde la composición del suelo, los fertilizantes utilizados y la rotación de las cosechas, hasta la madurez en el momento de la recogida y la variedad cultivada provocan que cada vez haya más alimentos, pero que alimenten menos.

LEER MÁS AQUÍ

Descubre por qué los alimentos tienen cada vez menos nutrientes y vitaminas

Publicado por: Hola México

La composición del suelo, los fertilizantes utilizados o la rotación de las cosechas son algunos de los factores que afectan a la calidad y sabor de los productos.

Tomates más rojos, manzanas brillantes, huevos idénticos… A pesar de que las estanterías están repletas de productos atractivos, la realidad es que tanta belleza no se refleja en el sabor ni en el valor nutricional de los alimentos. Especialmente en los países desarrollados, las dietas con productos naturales y frescos están siendo sustituidas por una alimentación rápida, artificial y, por consiguiente, vacía de nutrientes. Esas naranjas redondas y perfectas poseen menos cantidad de vitamina C que las de hace 50 años y esas coloridas cebollas no aportan la misma cantidad de selenio. Hay diferentes factores que pueden afectar al contenido en nutrientes de una verdura y que provocan que los alimentos que se consumen actualmente poco o nada tengan que ver con los que se ingerían hace medio siglo. Desde la composición del suelo, los fertilizantes utilizados y la rotación de las cosechas, hasta la madurez en el momento de la recogida y la variedad cultivada provocan que cada vez haya más alimentos, pero que alimenten menos.

LEER MÁS AQUÍ

Here’s What Agriculture of the Future Looks Like: The Multiple Benefits of Regenerative Agriculture Quantified

At the Union of Concerned Scientists, we have long advocated agricultural systems that are productive and better for the environment, the economy, farmers, farmworkers and eaters than the dominant industrial system. We refer to such a system as our Healthy Farm vision. Based on comprehensive science, we have specified that healthy farm systems must be multifunctional, biodiverse, interconnected and regenerative.

The scientific case for agricultural systems that renew rather than diminish resources is comprehensive, and research demonstrates the productivity and agronomic feasibility of such systems. Yet, economically viable real-world examples are necessary to spur acceptance and adoption of such schemes. Further, we need to overcome the limitations of economic thinking and measures that were developed in the 19th century—when it seemed that the Earth’s resources and its capacity to absorb waste were inexhaustible—and improve them to create more modern assessments, appropriate for the 21st century and beyond. A new report from our colleagues at Farmland LPDelta Institute and Earth Economics will make a major contribution toward this end.

KEEP READING ON THE UNION OF CONCERNED SCIENTISTS

As Climate Changes, Himalayan Farmers Return to Traditional Crops

Climate change is making food production harder for communities in the Indian Himalayas. Over the past few decades, there have been significant changes including higher temperatures, lower rainfall and more extreme and unpredictable weather.

Making sure communities have the food they need is key. Not just in order to achieve the Sustainable Development Goals’ target of zero hunger, but to make sure the Himalayas can withstand the challenges created by climate change. This requires agricultural systems that sustain natural resources, biodiversity and traditional crop varieties that give options for adaptation.

The International Institute for Environment and Development (IIED) and its partners, Lok Chetna Manch in Ranikhet, Uttarakhand, and the Centre for Mountain Dynamics in Kalimpong, West Bengal, have been conducting participatory action-research  with a number of traditional farming villages.

These villages lie in the central Himalayas’ Almora district, and Lepcha and Limbu villages near Kalimpong in the eastern Himalayas. The research is part of an EU-funded project, Smallholder Innovation for Resilience (SIFOR), which is designed to understand and strengthen the role of traditional biodiverse farming in food security and climate adaptation.

KEEP READING ON THE THIRD POLE

At Philo Ridge, a Couple Invests in Vermont’s Farming Future

On a mid-August morning at Philo Ridge Farm in Charlotte, sheep were grazing the paddock near the one-acre market garden as a straggler from the cow herd moved out to fresh pasture across Mount Philo Road. A group of 15 visitors sampled farm-grown zucchini sticks and mint leaves offered by tour guides who led them past rows of leafy greens shrouded under white fabric to protect them from pests.

Among the vegetables, perennials such as elderberries, highbush cranberries and hazelbert trees (a hazelnut and filbert cross) had been planted to attract pollinators and other beneficial wildlife, as well as to provide a windbreak for the ridgetop garden, detailed Francine Stephens, Philo Ridge’s food and farm director.

All the farm’s animals, including laying chickens and meat birds, she said, are moved regularly through the fields. This method, called intensive rotational grazing, is optimal for livestock, soil health and overall ecosystem resilience.

Philo Ridge’s approach falls under the category of “regenerative agriculture,” Stephens said, offering what she called a “super-simplistic” definition: “We’re trying really hard to put more nutrients into the soil than we’re taking out.”

KEEP READING ON SEVEN DAYS

An Agro-Ecological Europe: A Desirable, Credible Option to Address Food and Environmental Challenges

Alarming signals about the need for a transition of the agricultural and food system in Europe have been accumulating for several years and social expectation for such a transition is growing. How can we feed Europe – and feed it well – while preserving nature and the climate? This is the purpose of a study, which main conclusions are summarized in this paper.

Key messages

1. Current diets, which are too rich and unbalanced (three times the recommended amount of sugar, double the recommended amount of protein, not enough fruit, vegetables or fibre):

  • contribute to the increase in many conditions (obesity, diabetes, cardiovascular diseases);
  • lead Europe to depend on the rest of the world for food, through its imports of 40 million tonnes of plant proteins, which represent 20 % of its utilised agricultural land and far exceed the level of its exports.

2. The TYFA scenario is based on abandoning pesticides and synthetic fertilisers, redeploying natural grasslands and extending agro-ecological infrastructures(hedges, trees, ponds and stony habitats) and the generalisation of healthy diets (fewer animal products, more fruit and vegetables).

KEEP READING ON IDDRI